Con motivo del 8 de marzo de 2020
Las mujeres que hacemos AEScania somos muy distintas entre nosotras, no nos une una profesión y sin embargo nos ayudamos como si fuéramos del mismo gremio; no nos unen años de amistad, sin embargo, compartimos nuestros miedos y alegrías, como si nos conociéramos desde la infancia; tenemos diferentes edades y aún así nos reímos como si fuéramos de la misma generación; tenemos distintos sueños, aún así, hacemos los de cada una propios de todas y cuando una logra algo, sentimos que lo logramos todas, y nos empuja a todas.
Cada una hemos llegado a este país de una manera diferente, unas con puestos de alta responsabilidad y brillantes carreras; otras acompañando a sus parejas, dejaron atrás su profesión y estabilidad para empezar de cero; algunas han venido muy jóvenes para vivir una aventura, aprender un idioma, la mayoría obligadas a dejar atrás un país que no les dio la oportunidad de desarrollarse profesionalmente, algunas se hicieron mayores año tras año, pensando en volver y muchas otras tuvieron la oportunidad de volver a nuestra España, ellas siguen siendo nuestras hermanas.
Todas hemos dejado nuestras familias en España y hacemos lo que podemos para suplir la carencia.
Ahora estamos en este país y no importa como hemos llegado, porque todas nos hemos sentido y sentimos lo mismo, ilusión, miedo, frustración, esperanza, rabia, alegrías, añoranzas y retos. Un país que, nos acoge y nos da oportunidades y que también ha hecho que hayamos aprendido juntas lo que es ser mujer inmigrante, inmigrantes privilegiadas sí, pero inmigrantes. Lección de vida que saca lo mejor de nosotras para crear una hermandad y un calor humano que ayuda a vencer el más frío de los inviernos.
Con vosotras la sororiedad cobra especial sentido, felicidades también a todas las mujeres españolas que estáis fuera de España. Feliz día de la Mujer.